Woolworth ignorando las palabras de quien entonces fue su jefe, continuó adelante y se convirtió en un gran empresario, pionero en las tiendas de 5 y 10 centavos. Su concepto fue un verdadero Boom, en 1879 logró tener una cadena de tiendas en los Estados Unidos. En 1913 construyó El Woolworth Building que hasta 1930 fue el más alto de Nueva York, en el edificio se presenta un elocuente toque de humor: ¡Frank Woolworth contando su fortuna en monedas de cinco y diez centavos!
Cuentan que al pasar los años, su antiguo jefe dijo algo como esto: "Estoy seguro de algo, cada palabra que utilicé para argumentarle mi negativa a Woolworth, me ha costado alrededor de un millón de dólares".
***
Narré esta historia en un taller de capacitación; al terminar, el Gerente del departamento me pregunto con discreción - "¿Cómo hacemos para conseguir un personal como Woolworth?, - ¿Por qué es tan difícil hoy en día tener personal capaz de proponer nuevas ideas?"
Por eso le respondí: la clave está en ¡ESCUCHAR, ESCUCHAR y ESCUCHAR! Sólo así, como menciona Joel Barker: " Podrá descubrir a los que cambian paradigmas"
Alyzu Delgado Montenegro
No hay comentarios:
Publicar un comentario